Las pautas de intervención surgen como resultado de las necesidades que presentan los alumnos a nivel académico, por lo que el equipo docente de un colegio o instituto debe tener en cuenta esta serie de pautas en el caso de dar clase a alumnos con necesidades educativas especiales. Las necesidades de los alumnos con diversidad funcional intelectual no solo tienen origen en sus limitaciones, sino también en lo que se refiere a su nivel de competencia curricular, estilo de aprendizaje y las condiciones de la situación de enseñanza y aprendizaje en la que se encuentra. Estas necesidades se concretan mediante una evaluación que se realiza al alumno. Una vez que se conoce el nivel de aprendizaje de los alumnos, se pretende adaptar la programación del aula según las necesidades especiales de los estudiantes.
A la hora de adecuar la programación de aula se hace referencia a cuatro fases:
- Objetivos y contenidos
- Introducción de objetivos y contenidos: han de introducirse aquellos elementos pertinentes a las características de los alumnos. Como comienzo, se debe potenciar el conocimiento y el respeto mutuo así como la aceptación de la diferencia. Cuando se consigan estas competencias básicas, se podrá continuar con las áreas de conocimiento del medio natural, social y cultural. Por ejemplo, dentro del bloque de "La salud y el desarrollo personal" encontramos los siguientes contenidos:
Características diferenciales del cuerpo humano: sexo, color, altura, etc.
Dificultades personales en determinados momentos del desarrollo. Movilidad, control postural etc.
Diferencias entre las personas a la hora de participar en los juegos, realizar tareas o resolver
problemas.
La ayuda y cooperación con los compañeros que tienen dificultades para realizar determinadas
actividades.
- Dar prioridad a determinados objetivos y contenidos: consiste en dedicarle más tiempo a aquellos contenidos que resulten especialmente relevantes para los estudiantes con necesidades especiales. Algunos de los objetivos más importantes a destacar son:
Desarrollo de la comunicación, como elemento facilitador de la interacción con los demás y la
adaptación social del alumno.
Desarrollo de la lectoescritura, teniendo en cuenta que los alumnos con discapacidad intelectual, no
sólo presentan dificultades en los procesos de decodificación, sino mayormente en la comprensión del
texto y la expresión escrita.
La habilidad para utilizar los números y las operaciones básicas, en las diferentes situaciones de la
vida cotidiana.
El desarrollo de las relaciones interpersonales y la adaptación social de los alumnos.
- Metodología
La metodología es la manera de conseguir los objetivos. Es necesario partir de una metodología común que incluya los suficientes contenidos para proporcionarle motivación a los alumnos con la finalidad de que progresen en su aprendizaje. Algunas pautas para adecuar la metodología al aula son:
- Determinar y actualizar los conocimientos previos de los alumnos antes de iniciar un nuevo proceso de enseñanza y aprendizaje. Al iniciar el trabajo de una nueva unidad didáctica, puede ser oportuno revisar la información que ya tienen los alumnos sobre los contenidos a tratar, para determinar con más precisión si las tareas previstas son adecuadas o se precisa incorporar alguna no prevista con anterioridad.
- Globalizar los contenidos en torno a centros de interés que conecten con experiencias o intereses de los alumnos.
- Hacer uso de estrategias que incluyan la experiencia directa y la reflexión sobre ella, como el aprendizaje por descubrimiento.
- Utilizar técnicas que permitan la colaboración entre los alumnos y la aportación de cada uno desde sus competencias reales, como el aprendizaje cooperativo o la enseñanza tutelada.
- Adecuar el lenguaje al nivel de comprensión de los alumnos, utilizando con frecuencia las preguntas para comprobar que aquellos que presentan mayores dificultades son capaces de entender lo que se les está exponiendo y para tener la seguridad de que saben lo que tienen que hacer y cómo han de realizarlo.
- Actividades
La metodología se divide en un conjunto de actividades en las se materializan las actuaciones concretas con la finalidad de que facilite los objetivos y que permita aprender a todos. Algunas pautas para el desarrollo de las actividades son las siguientes:
- Plantear actividades que permitan trabajar con distinto grado de dificultad, sobre un mismo contenido. Habitualmente los materiales de trabajo, casi siempre libros de texto y cuadernos de trabajo del alumno, sobre cada contenido plantean algunas actividades de iniciación, con menor dificultad y a continuación otras de mayor complejidad, pero en numerosas ocasiones es preciso modificar ese repertorio de tareas para determinados alumnos.
- Incorporar algunas actividades previas a las propuestas por el libro de texto, para permitir que algunos alumnos estén en condiciones de acceder a estas últimas, aunque probablemente no harán las mismas que otros compañeros con distintas posibilidades.
- Sustituir algunas de las actividades del texto por otras más adecuadas a la situación de determinados alumnos.
- Modificar algunas de las actividades propuestas, para hacerlas más adecuadas a determinados alumnos. Por ejemplo, si se propone realizar un problema que requiera el uso de dos operaciones
combinadas, caben varias modificaciones:
Simplificar y reducir el texto.
Sustituir las cantidades por otras más familiares para determinados alumnos.
Descomponer el problema en dos partes, de modo que quede más claro el contenido del mismo.
- Proponer, sobre el mismo contenido, actividades individuales y grupales.
- Prever la realización de actividades susceptibles de ser realizadas en diferentes situaciones y contextos: en el aula, en el entorno familiar, en el barrio etc.
- Diseñar actividades de libre ejecución en función de los intereses de los alumnos.
- Evaluación
Desde el punto de vista habitual, esta fase consiste en la comprobación de los resultados obtenidos; desde el punto de vista educativo, consiste en mostrar la idoneidad de la propuesta pedagógica y la necesidad de su revisión, a partir de los datos que se van obteniendo. Las respuestas que los alumnos emiten diariamente en la clase, la participación en las tareas, las producciones obtenidas, ofrecen información variada y útil para evaluar los procesos de aprendizaje. Las respuestas de los alumnos con necesidades especiales deben ser coherentes con las adaptaciones que se hayan llevado a cabo:
- Si algún alumno precisa habitualmente más tiempo para realizar las tareas escolares, dispondrá de más tiempo para realizar las pruebas de evaluación.
- Si en algún caso se han realizado adaptaciones en el contenido o presentación de las tareas, se mantendrán esas adaptaciones en las pruebas de evaluación.
- Se utilizarán instrumentos variados de evaluación con el fin de facilitar la comunicación de lo aprendido por parte de los alumnos.
Los resultados obtenidos por los alumnos, informan de manera privilegiada la idoneidad del trabajo planificado por los docentes a los que les permite tomar decisiones:
- Sobre la necesidad de ayuda complementaria a algún o algunos alumnos que cometan más errores de los esperados.
- Sobre la conveniencia de modificar, en alguna medida, la planificación del trabajo a desarrollar en el aula.
![]() |
Fuente: www.laopinioncoruna.es |
Bibliografía
"Intervención educativa en el alumnado con discapacidad intelectual", F. Cegarra Andrés y G. García Vilar. Equipo de Orientación Educativa y Psicopedagógica. Murcia.
Escrito por Irene Martín
No hay comentarios:
Publicar un comentario